Día de la Independencia
Monthly House View - Junio 2024 - Descargar aqui
Además de la celebración este año del 80 aniversario del desembarco de Normandía, el 6 de junio también podría convertirse en una fecha importante para los mercados financieros. En este mismo día, el Consejo del Banco Central Europeo (BCE) se reúne para tomar una decisión histórica sobre política monetaria y recortar probablemente los tipos de interés en la zona euro, antes que la Reserva Federal estadounidense (Fed).
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, ya definió la actuación del banco central como «dependiente de los datos económicos» y no «dependiente de la Fed». Con la inflación cayendo más rápido de lo esperado, hasta el 2,4% en mayo, frente al máximo del 10,6% en octubre de 2022, en nuestra opinión, el BCE deberá recortar sus tipos de interés cuatro veces este año a partir de junio y, potencialmente, de dos a cuatro veces el próximo año, hasta llegar al 2% o 2,5%.
¿TRAYECTORIAS DIVERGENTES EN LA POLÍTICA MONETARIA?
En cambio, la inflación estadounidense se está mostrando más rígida, lo que ha llevado al presidente de la Fed, Jerome Powell, a indicar a los inversores que no espera que la Fed vuelva a subir los tipos, y que hay que ser «paciente y dejar que la política restrictiva haga su trabajo». Existen numerosos datos que ponen de relieve un proceso de desinflación más avanzado en la zona euro que en EE. UU., lo que explica en gran medida la divergencia de las trayectorias monetarias. En lo que respecta a la Fed, el mercado sigue dividido. Tras la tranquilidad que aportó la inflación de mayo, el mercado prevé ahora dos descensos a partir de septiembre, frente a los siete de principios de año y a uno que se esperaba antes de conocer las cifras de la inflación. Nosotros mismos aún incluimos tres recortes en 2024 y otros tres en 2025, hasta alcanzar el 4%, pero una secuencia de dos y, más tarde, de cuatro recortes es claramente posible. Jerome Powell ha recuperado recientemente la credibilidad en su discurso sobre la inflación, y la última caída de las ventas minoristas ha vuelto a poner el escenario de «ricitos de oro» en el punto de mira de los inversores.
LIQUIDEZ ABUNDANTE
A principios de año, escribíamos que los flujos masivos de liquidez hacia los fondos del mercado monetario en 2023 podrían ser una fuerza de apoyo importante para los mercados de renta variable, ya que esta liquidez podría desplazarse hacia activos de mayor riesgo en caso de descenso de los tipos. Los flujos hacia EE. UU. siguen siendo importantes este año, con más de 200.000 millones de dólares, pero a un ritmo mucho más lento que el año pasado, mientras que los flujos dirigidos a la renta variable han ascendido a 150.000 millones de dólares hasta el momento, lo que casi equivale a los flujos de todo 2023. Es probable que se produzcan nuevas reasignaciones, pero la cuestión clave será a qué parte del mercado empezarán a orientarse los inversores.
En unas recientes jornadas sobre inversión celebradas en París, más del 52% de los inversores seguía esperando que la renta variable ofreciera este año los mejores resultados, y la mayoría se mostraba «moderadamente optimista». No son los únicos: las propias empresas siguen recomprando sus acciones a un ritmo récord. En mayo, Apple anunció su nuevo plan de recompra de acciones por valor de 110.000 millones de dólares, el mayor de la historia de EE. UU.: de los diez mayores planes de recompra de acciones, la compañía está detrás de los seis primeros. Desde 2012, ha reducido el número de sus acciones en un 40%.
Con la mejora de la situación macroeconómica en Europa empieza a emerger una nueva rotación. Sin embargo, la pequeña capitalización sigue rezagada, tal como refleja el índice MSCI Europe Small Cap, que se ha quedado un 30% rezagado con respecto a su equivalente de la gran capitalización en los últimos tres años, aunque la clase de activos está empezando a despertar nuestro interés. Con valoraciones muy atractivas, un crecimiento sostenido de los beneficios y salidas masivas de capital en los últimos años, podrían volver ser objeto de atención. Aunque la renta variable sigue siendo atractiva, tanto en EE. UU. como en los mercados emergentes, creemos que los inversores se replantean ahora las carencias de sus carteras y buscan ir más allá de lo que ya tienen, y la pequeña capitalización podría convertirse en una alternativa convincente.
En esta edición, les ofrecemos una nueva sección sobre los mercados privados y les invitamos a leer el artículo de Matthieu Roumagnac sobre la temática de infraestructuras. A partir de ahora, esta publicación incluirá trimestralmente una sección Mercados Privados.
Monthly House View, 23/05/2024 – Extracto del Editorial
05 junio 2024